El reportaje de boda de una sesión con atardecer y caballos
“Subimos caminando desde la Piazza dil Poppolo, en Roma, hacia los jardines de Borghese. Allí, en unos miradores, hacia el oeste, se ve el skyline de la ciudad al atardecer, y en una balconada escondida, sin nadie a la vista, me pidió matrimonio”. Bea y Gon comenzaron su historia en la romántica Italia y celebraron su boda con el atardecer de Madrid.
Bea es la definición de elegancia y feminidad. Su vestido de novia fue obra de Lorenzo Caprile: un diseño con cuello de barco y espalda medio descubierta.
Tras darse el “Sí, quiero” en la Iglesia de San Manuel y San Benito, el convite se celebró en la finca El Pendolero: un espacio rodeado de campos con caballos y las alucinantes vistas de Madrid como escenario de fondo.