La novia de la corona de esmeraldas y las fotografías de su boda
El cariño que desprende esta pareja es difícil de explicar con palabras. Natalia y Fran son de esos novios que lo ponen todo fácil, de los que siempre te alegra tener cerca. Tanto es así, que la anécdota comenzó al descubrir que éramos vecinos.
El Hotel Santo Mauro fue el lugar donde la novia, acompañada de su familia e íntimas amigas brindaron justo antes de salir hacia la iglesia, no sin antes fotografiar la infinita cola de su vestido, diseño de Cristina Valenzuela, en la emblemática escalera del hotel.
La pareja se dio el “Sí, quiero” en la arquitectónica y simbólica Parroquia Santa María de Caná. Tras las innumerables y contagiosas lágrimas de emoción de Natalia, los novios se desplazaron en su descapotable hasta la finca de La Quinta de El Jarama, donde la pareja y sus invitados disfrutaron de una fiesta llena de luces de colores.